martes, 28 de septiembre de 2010

una hora de tu tiempo

Después de un día de trabajo, un hombre volvió a su casa cansado e irritado y encontró a su hija pequeña esperándole en la puerta.

_ ¿Papá puedo hacerte una pregunta? ¿Cuánto ganas en una hora?

_ Eso no es asunto tuyo- respondió enojado.

_ Sólo quiero saberlo. Por favor, dime cuánto ganas -insistió la pequeña.

_ Bien, si quieres saberlo, en una hora gano 20 euros.

La niña mirando a su padre le dijo:

- Papá ¿puedes prestarme 10 euros?

A lo que el padre le respondió furioso:

_ Si la única razón por la que me has preguntado es para pedirme dinero y así comprarte algún capricho, vete a tu cuarto y piensa porqué estás siendo tan egoista. No tengo tiempo para tus tonterías infantiles.

La niña se fue sollozando a su cuarto.

Cuando al padre se le pasó el enfado, fue a ver a la niña.

_ Tal vez he sido muy duro. he tenido un mal día. Aquí están los diez euros.

Entonces la niña sacó unos billetes arrugados y se los dio a su padre.

_ ¿Por qué me pides dinero si ya tienes?

_ Porque no tenía bastante. Ahora ya tengo 20 euros. ¿Puedo comprar una hora de tu tiempo? Quiero que vuelvas temprano a casa para estar más tiempo contigo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario